España es el tercer exportador de frutas y verduras del mundo, sólo después de EE.UU y China. Esta posición coloca a nuestro país en un lugar protagónico dentro de la producción industrial de alimentos. Ser líderes mundiales o europeos en producción de alimentos - como el mango, el aguacate, la fresa, el aceite de oliva o la carne de cerdo - provoca que tanto el territorio y sus recursos naturales como las personas que lo habitan están orientadas a la máxima producción y rentabilidad económica, alejados de cualquier equilibrio con el medio ambiente o los derechos más básicos de las personas.
Hasta que la tierra aguante es una investigación periodística y visual, una ruta por la España interior y los grandes centros de producción de alimentos para analizar las consecuencias ambientales, sociales y sanitarias de un modelo de producción alimentaria anclado en la codicia y que niega los límites de capacidad biológica del planeta.
La agricultura y la ganadería tienen un papel muy importante en el avance del cambio climático, consumiendo enormes cantidades de agua, explotando el suelo y sus nutrientes, generando residuos y contaminación que bañan nuestros ríos y acuíferos y empleando mano de obra en régimen de semiesclavitud.
Pero este proyecto también es una llamada a la reflexión para los habitantes de las ciudades y al modelo de consumo y económico urbano. La manera de consumir y alimentarnos provoca la explotación descontrolada de los recursos y las personas del entorno rural por parte de grandes multinacionales. Producimos cómo consumimos y viceversa.
Este proyecto ha tenido una huella de carbono de 4 toneladas de CO2